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martes, 19 de marzo de 2013

ELCHE, MUSEO Y BAÑOS ÁRABES

(Foto de Dolores González)

Lo primero que encontramos al visitar Elche son su espacios, tan abiertos, con jardines cuidados y parques donde es fácil perderse un rato.
La visita a esa ciudad con tanta Historia, fue impulsada por conocer también algunos de sus emblemas arquitectónicos, La torre de Calahorra, El castillo con sus baluartes, la iglesia de Nª Sra. de la Concepción, la plaza, la Huerta del Cura, etc.
Edificios algunos llamativos, obra de algún arquitecto vanguardista , pero que no rompe del todo con la estética del lugar. 
Para entrar al museo del MAHE hizo falta sumergirse debajo de sus calles...

(Foto propia)


En cuanto bajamos la escalera, aparte de la amabilísima chica de recepción, nos encontramos una copia de su excelentísima Dama de Elche, recordemos que la original se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional, en Madrid.

(Foto de Dolores González)

Existen réplicas en resina y en piedra repartidas por los museos, luego ya, después de habernos presentado, nos adentramos a un MAHE muy bien cuidado, muy bien expuesto y sin escatimar en presentaciones audiovisuales para el público en diferentes idiomas.

Tener a Elche a nuestros pies cuando entramos, es una sensación muy particular, pero así fue.
(Foto propia)

Elche a vista de pájaro... genial idea.


La exposición del museo tenía un sin fin de piezas expuestas a cuál más interesante. Obviamente tomar foto de todas es posible, pero no para presentarlas en un blog que sólo paseamos por encima, para invitar al que le interese a ser su propio recorrido y crear sus propios recuerdos de los mismos.
(Fotos propias)

El Levante español, es sabido que albergó en sus tierras diferentes culturas a lo largo de los milenios. Desde el Paleolítico, Neolítico, Las Edades de Piedra, Hierro y Bronce, hasta la invasión musulmana y la reconquista, y un largo etcétera de acontecimientos, culturas y gentes en su haber.

Los fenicios no pudieron ser menos, y dejaron su huella, así como los íberos, romanos, etc.
Una figura emblemática de aquellas culturas es esta que pongo a continuación que es una de las más hermosas que se encuentran en el museo, a mi modesto entender.
(Foto propia)

Cuando terminamos el recorrido del MAHE, sin darnos cuenta, comunicamos con la estructura del castillo que vimos en la foto anteriormente expuesta. Una fortaleza islámica que, pese a que ha sido reformada en varias ocasiones, no deja de tener una belleza paisajística singular.






(Fotos propias)

Tengo que decir que el trabajo que han hecho dentro del viejo castillo es sensacional. Una puesta en escena de sensores de movimiento para que según pasees te cuenten en vídeos y audios la Historia de cada uno de los lugares emblemáticos de la ciudad. Mucha cristalería, y muy bien cuidado todo. 

Lugares de acceso abiertos casi todos al público, y la visita aunque es autoguiada, es muy amena, tanto, que se nos echan las horas encima sin darnos cuenta.
Las salas están explicadas con paneles y vídeos, y audios que hacen que no te sientas solo/a mientras observas con detenimiento aquello que te interesa.


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(Fotos propias)

Subimos a ver las vistas, pero antes, el patio de armas...

(Foto propia)


Las vistas desde lo alto de la fortaleza, son hacia el palmeral y el centro de la ciudad, obviamente antes no había esas grandes construcciones que tenemos actualmente. Una vista bellísima hacia el Vinalopó, que junto al puente, hacen que Elche tenga un encanto especial.
También hay que agradecer a que el día se comportó maravillosamente, y nos dejó lucir las fotos y reflejar el azul del cielo.



(Fotos propias)

LOS BAÑOS ÁRABES


Abandonamos el estupendísimo museo-fortaleza de Elche, y nos vamos callejeando muy cerca de allí, hacia los baños árabes de la ciudad. no son los únicos que se conservan en Valencia comunidad autónoma, pero sí eran los que me quedaban más cerca para visitar, y así lo hicimos.
En una puertita, en el bajo de un convento del siglo XIV, se encuentran los vestigios de unos baños datados en el siglo XII.
Breve Historia:
Los baños árabes de Elche datan del s. XII y a pesar de no ser los únicos en la ciudad, sí son los únicos que se han conservado. En su época, la existencia de baños en una ciudad simbolizaba bienestar económico y prosperidad. además de facilitar la purificación como obligan los preceptos coránicos. Los baños eran un elemento clave del mundo musulmán.
 En el interior de los baños existían tres salas. La más popular era la "sala caliente", construida de losas de piedra, se sostenía por ocho pilares entre los cuales circulaba aire caliente del horno de la sala contigua a través de un túnel subterráneo. Este sistema de expulsión de aire caliente alcanzaba altas temperaturas originando lo que hoy conocemos como "sauna".

(Fotos propias)

El funcionamiento era sencillo. En los extremos, bancos para sentarse y pilas de agua fría para refrescarse. Como elementos de higiene y protección, toallas y zuecos de madera. No se permitía que hombres y mujeres acudieran juntos a los baños, por ello se establecían turnos.



(Fotos propias)

EL CONVENTO DE LA MERCED S. XIV

A partir del año 1270, la ciudad de Elche va cambiando su fisonomía islámica bajo la autoridad del Rey de Castilla. por orden del Infante Don Manuel los monjes de la Orden de la Merced tomaron posesión de los baños para fundar un convento.







domingo, 10 de marzo de 2013


CASA- MUSEO MODERNISTA



(Foto propia)


Este edificio noveldense fue en sus orígenes una mansión unifamiliar de la alta burguesía; se construyó entre los años 1900 y 1903, y está considerado como un excelente ejemplo de arquitectura ecléctico-modernista.

La ornamentación exterior, fundamentalmente la de la fachada principal, incluye elementos extraídos del Arte Antiguo y retomados en la Edad Moderna, pero también se alternan con otros procedentes del Nuevo Estilo.
El aprovechamiento de la luz solar en los interiores de los edificios era una de las cuestiones planteadas por los higienistas de la época. La solución que se adopta en esta mansión, se centra en dos bóvedas de vidrios de colores emplomados. Estas claraboyas están situadas, respectivamente, sobre el hueco de la escalera y del vestíbulo.

(Foto propia)

El recurso de una destacada galería de madera rodeada de grandes ventanales, permite que la luz proveniente de ambas claraboyas, confluya a la altura de la primera planta, creando una atmósfera envolvente al filtrarse a través de los cristales.

(Foto propia)

La pintura, en sus distintas manifestaciones técnicas, contribuye a lograr un tono decorativo y cromático en el interior modernista. Aquí pueden admirarse cenefas de exquisito diseño floral Art Nouveau, que recorren paredes y techos, un óleo sobre lienzo en el techo del salón, pero sobre todo destaca un conjunto de pinturas sobre tejido, a modo de tapices, que recubren por completo las paredes del comedor. El recorrido de estas pinturas se transforma en un viaje idílico cuyo tema principal es la Mujer inmersa en la Naturaleza.

(Foto propia)

La imagen arquitectonica Art Nouveau busca la obtención de efectos visuales sorprendentes, merced a la amplia utilización de la línea curva, así como también a múltiples secuencias de planos. En este sentido, la Casa-Museo Modernista proporciona dos ejemplos singulares: el desarrollo ascendente de la escalera en espiral, que desde el pilar de arranque junto al vestíbulo parece alcanzar la bóveda del techo, y la reiteración de planos que compartimentan el espacio a lo largo del eje horizontal que se inicia con la puerta-cancela, y finaliza con la puerta, de espléndido diseño Art Nouveau, que comunica con un patio.
(Foto propia)

En su conjunto, el interior de la Casa-Museo responde plenamente al programa de unificación de todas las artes, principio básico del Art Nouveau, y que incluye una producción muy variada de obras artísticas realizadas con distintos materiales: madera, metal, vidrio, estuco, etc. Y así, en el arte de la madera, sobresalen los parqués, arrimaderos, mobiliario, la galería del vestíbulo y los espléndidos conjuntos del despacho y comedor. 
(foto propia)

En el trabajo del metal, además de los hierros en ventanas y balcones, destaca la puerta-cancela y la balaustrada de la escalera.

(Foto propia)

Igualmente, los detalles tanto en bronce como en latón aparecen aquí muy cuidados. En cuanto al vidrio, destacan las bóvedas y los cristales decorados de la galería, comedor y puertas de las habitaciones que comunican con el salón. Se conservan suelos mosaicos hidráulicos, estucos policromados y numerosos objetos adicionales que imprimen a la Casa-Museo su carácter único.

EXPOSICIÓN EL LEGADO DE JORGE JUAN
(Foto propia)

La casa-Museo Modernista de Novelda, contiene además una colección documental original del insigne marino y científico español del siglo XVIII, Jorge Juan y Santacilia, uno de los llamados "Caballeros del Punto Fijo", delegados por el Rey de Francia y que además fue miembro de las expediciones botánicas, zoológicas y geográficas que impulsaron la Ciencia española durante la Ilustración. Jorge Juan, natural de Novelda, fue uno de los más jóvenes oficiales de la Marina de su época . Perteneció a las mayores instituciones científicas de Europa. Nombrado caballero de la Orden de Malta, participó junto a los franceses, La Condamine y Bouguer en las triangulaciones y observaciones que la famosa expedición francesa realizó en las montañas de Perú, para determinar el meridiano y, por tanto, las medidas de la Tierra.
Caja Mediterránea adquirió el legado de Jorge Juan, compuesto de cartas epistolares, anotaciones científicas y cartas marinas, entre otros documentos y objetos, en 1996, y desde entonces se exhibe en la Casa-Museo Modernista de Novelda, como una documentación imprescindible para entender una buena parte de la Historia de España, desde los reinados de Felipe V a Carlos III.

(Foto propia)